Harris convierte de nuevo a Georgia en un campo de batalla electoral
Atlanta (EE.UU.) (EFE) – Georgia se ha convertido en un campo de batalla crucial para las elecciones presidenciales de EE.UU., especialmente con la vicepresidenta Kamala Harris recorriendo el estado en autobús durante dos días. Este estado fue decisivo en 2020, cuando Joe Biden ganó a Donald Trump por menos de 12,000 votos.
Jerry González, director ejecutivo de la Asociación de Funcionarios Latinos Electos de Georgia (GALEO), ha señalado el entusiasmo generado por Harris entre la comunidad latina del estado. González ha observado un aumento en la inscripción para votar y un mayor interés en conocer más sobre Harris, una figura clave en la campaña demócrata.
En 2020, los latinos jugaron un papel crucial en el cambio de Georgia hacia los demócratas, algo que no ocurría desde 1992. González ha destacado que el voto latino será nuevamente fundamental en las próximas elecciones, ya que las encuestas muestran una competencia muy reñida entre Harris y Trump para las elecciones del 5 de noviembre.
La nominación de Harris ha revitalizado a Georgia como un «estado bisagra» o «swing state», especialmente tras la baja popularidad de Biden, que se produjo después de un debate con Trump en Atlanta el 27 de junio. Las encuestas actuales muestran un empate virtual entre los candidatos, lo que refleja la importancia de cada voto en este estado clave.
La gira de Harris y su compañero de fórmula, Tim Walz, gobernador de Minnesota, comenzará el miércoles en el sur de Georgia, marcando el primer evento de campaña tras la Convención Nacional Demócrata en Chicago. La gira culminará en Savannah el jueves, subrayando la importancia de movilizar a una coalición diversa de votantes en el estado.
La campaña de Harris en Georgia cuenta con el apoyo de casi 35,000 voluntarios, más de 170 miembros del personal y 24 oficinas. Por otro lado, Donald Trump y su compañero de fórmula, JD Vance, también han intensificado su campaña en Georgia, abordando temas clave como inmigración y seguridad fronteriza.
Además de la batalla electoral, Georgia está envuelta en una disputa legal. Los demócratas han presentado una demanda contra la Junta Electoral de Georgia, alegando que nuevas reglas podrían causar «caos» electoral y beneficiar a Trump. Los demócratas solicitan que la certificación de los resultados electorales se realice obligatoriamente antes de la fecha límite legal del 12 de noviembre, en lugar de dejarla a la discreción de la Junta.
La importancia de Georgia en las elecciones es evidente en los esfuerzos de ambos partidos para movilizar a sus bases y en la batalla legal que se desarrolla en torno a las reglas electorales del estado. La dinámica política en Georgia seguirá siendo un factor clave en las próximas elecciones presidenciales.
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