Entrenadora de bicampeona paralímpica peruana denuncia falta de apoyo oficial
Lima (EFE) – Yvonne de la Cruz, entrenadora de la reciente bicampeona paralímpica de taekwondo Angélica Espinoza, denunció este viernes que tanto ella como su pupila han enfrentado «muchas injusticias» por parte de la Federación Peruana de Taekwondo. Según De la Cruz, la Federación retiró el apoyo a Espinoza y la destituyó como preparadora oficial, complicando la preparación de la atleta para los Juegos Paralímpicos de París 2024.
De la Cruz expresó su emoción por la medalla de oro obtenida por Espinoza el jueves, describiéndola como una «verdadera hazaña» dado que solo pudieron entrenar juntas durante un mes antes del evento paralímpico. La entrenadora destacó que este oro tiene un significado aún mayor debido a la falta de apoyo institucional.
«Esta medalla significa mucho más que la anterior porque hemos venido sufriendo muchas injusticias por parte de la Federación Peruana de Taekwondo. Me sacaron como entrenadora oficial para estar en París con ella,» comentó De la Cruz. A pesar de la falta de apoyo de la Federación y el Instituto Peruano del Deporte (IPD), continuó entrenando a Espinoza de manera particular.
Espinoza, de 26 años, ganó en la categoría k44 de -47 kilos en los Paralímpicos de París, completando un torneo impecable al vencer a la camerunesa Guileine Chemogne (28-9), a la iraní Maryam Abdollahpour (19-9), a la marroquí Naoual Laarif (que se retiró en semifinales) y a la uzbeca Ziyodakhon Izakova (10-4) en la final.
El triunfo de Espinoza fue ampliamente celebrado por la Presidencia de Perú, que agradeció a la atleta por «hacer brillar» la bandera nacional. La presidenta Dina Boluarte destacó en redes sociales que Espinoza revalidó la medalla de oro obtenida en Tokio 2020, destacando su importancia para el país.
El IPD también reconoció a Espinoza como la «primera bicampeona paralímpica peruana» en la historia, subrayando la relevancia histórica de su logro. Espinoza se convierte en la primera mujer paralímpica peruana en obtener dos medallas de oro, un logro que consolida su posición en la historia del deporte paralímpico peruano.
El reconocimiento nacional contrasta con las dificultades enfrentadas por Espinoza y su entrenadora. La falta de apoyo institucional y la destitución de De la Cruz reflejan un conflicto entre el éxito individual y la gestión institucional, planteando interrogantes sobre el apoyo real que reciben los atletas en Perú.
En resumen, el oro de Angélica Espinoza en los Juegos Paralímpicos de París 2024 no solo resalta su habilidad y dedicación, sino también las dificultades y desigualdades que enfrentan los atletas cuando las instituciones que deberían apoyarlos fallan en cumplir su función. A pesar de los obstáculos, el logro de Espinoza es un testimonio de la perseverancia y el talento que trasciende las barreras institucionales.
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